Luis Felipe Vásquez Aldana autor de Apocalipsis del alma, antología poética contenida en libro Colectivo Poético María Mulata
Un grupo de trece poetas le regala al universo la antología: Colectivo Poético María Mulata publicada por la editorial Santa Bárbara. En el poemario descubrimos un manojo de sentimientos diversos que en urdimbre y trama exquisitos le tejen un traje a la belleza:” Me refugio en la poesía porque es la única que no tengo que explicarle mi vesania”, nos dice con dolor y nostalgia René Mazzilli Fonseca. Alfonso José Ávila Pérez, nos dice que estar contigo “es romper en mil pedazos la niebla gris de la tristeza”.
Luis Felipe Vásquez Aldana testimonia con su verso cósmico que la poesía es universal, es del empíreo: “La fuerza que me ayuda, es un verbo infinito perdido en el amor”. Diana Pedrosa Cadena poetisa mayor nos dice:”enséñame de nuevo el día en tus ojos de ángel me miraron”. Antonio Quintero Palmera vuelve a la levedad nombrada, con la palabra inicial y nos dice:” Recorro la vendimia de tu cuerpo”.
Esta antología se propone como un homenaje a Abel José Ávila Guzmán, poeta, cuentista, novelista, ensayista y mecenas.
Reinaldo Bustillo Cuevas.
Extraído del Prólogo del libro:
Colectivo Poético María Mulata
En la colección que reúne el trabajo de trece vates: Colectivo poético María Mulata publicada por la editorial Santa Bárbara (2011) se presentó el poemario Apocalipsis del alma, escrito por el autor barranquillero Luis Felipe Vásquez Aldana. La lectura de esta antología Poética nos remonta a la frase: Multa Paucis (mucho en pocas palabras). Después de varios años de inquietudes y desencuentros sobre el papel, Vásquez Aldana finalmente logra atraparnos con páginas mágicas, devolviéndonos la idea de que la poesía es cósmica y los poetas son de otra raza, devela el dialogo interno y la lucha milenaria del ser frente así mismo en cada uno de los versos, consagrándose en las hojas como un poeta y escritor mágico que tiene conexos cercanos a la espiritualidad y la inspiración.
Vásquez Aldana nos regala una obra con un lenguaje casi vetusto que divide en trece poesías valiéndose del recurso de la prosa, apelando a la cosmogonía bautiza cada uno de ellos con un nombre bíblico “Génesis” su primer poema. Cada palabra escrita en esta antología es una metáfora que quiere exorcizar el inconsciente con la ambición de remover el viejo hombre; intensión que se afirma con el poema:
El éxodo de mi alma es una promesa peregrina:
“El maná es tu hijo,
Y el placer, tu codorniz podrida”
Vásquez increíblemente desde lo mitológico le instala vestido y temperamento animado al pasado y a los recuerdos cuando nos dice:
“Al parecer, un faraón maniático es mi inconsciente”
Del génesis al apocalipsis como la historia bíblica que nunca se extingue, Luis Felipe Vásquez Aldana con este su poemario nos revela que pertenece a esa generación fantástica de caminantes que habla el lenguaje que no se ahoga. La palabra escrita.
Luis Felipe Vásquez Aldana testimonia con su verso cósmico que la poesía es universal, es del empíreo: “La fuerza que me ayuda, es un verbo infinito perdido en el amor”. Diana Pedrosa Cadena poetisa mayor nos dice:”enséñame de nuevo el día en tus ojos de ángel me miraron”. Antonio Quintero Palmera vuelve a la levedad nombrada, con la palabra inicial y nos dice:” Recorro la vendimia de tu cuerpo”.
Esta antología se propone como un homenaje a Abel José Ávila Guzmán, poeta, cuentista, novelista, ensayista y mecenas.
Reinaldo Bustillo Cuevas.
Extraído del Prólogo del libro:
Colectivo Poético María Mulata
En la colección que reúne el trabajo de trece vates: Colectivo poético María Mulata publicada por la editorial Santa Bárbara (2011) se presentó el poemario Apocalipsis del alma, escrito por el autor barranquillero Luis Felipe Vásquez Aldana. La lectura de esta antología Poética nos remonta a la frase: Multa Paucis (mucho en pocas palabras). Después de varios años de inquietudes y desencuentros sobre el papel, Vásquez Aldana finalmente logra atraparnos con páginas mágicas, devolviéndonos la idea de que la poesía es cósmica y los poetas son de otra raza, devela el dialogo interno y la lucha milenaria del ser frente así mismo en cada uno de los versos, consagrándose en las hojas como un poeta y escritor mágico que tiene conexos cercanos a la espiritualidad y la inspiración.
Vásquez Aldana nos regala una obra con un lenguaje casi vetusto que divide en trece poesías valiéndose del recurso de la prosa, apelando a la cosmogonía bautiza cada uno de ellos con un nombre bíblico “Génesis” su primer poema. Cada palabra escrita en esta antología es una metáfora que quiere exorcizar el inconsciente con la ambición de remover el viejo hombre; intensión que se afirma con el poema:
El éxodo de mi alma es una promesa peregrina:
“El maná es tu hijo,
Y el placer, tu codorniz podrida”
Vásquez increíblemente desde lo mitológico le instala vestido y temperamento animado al pasado y a los recuerdos cuando nos dice:
“Al parecer, un faraón maniático es mi inconsciente”
Del génesis al apocalipsis como la historia bíblica que nunca se extingue, Luis Felipe Vásquez Aldana con este su poemario nos revela que pertenece a esa generación fantástica de caminantes que habla el lenguaje que no se ahoga. La palabra escrita.
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